“…En el mundo debe haber cierta cantidad de decoro como hay cierta cantidad de luz que necesitamos. Cuando hay muchos hombres sin decoro, hay siempre otros que tienen en sí el decoro de muchos hombres. Esos son los que se revelan con fuerza terrible contra los que le roban a los pueblos su libertad, que es robarles a los hombres su decoro. Tras de esos hombres van miles de hombres, va un pueblo entero, va la dignidad humana…”
José Martin.
Aún en los pueblos gobernados por personajes donde la academia, los buenos modales, y la escala de valores no le son familiares, escogen algunos pocos que marcan la diferencia para representar al país en organismos internacionales. Con la presidencia del señor Donald Trump en EEUU, ni siquiera esto. Su gabinete es un mosaico
donde campea la mediocridad, la ineptitud y todo quiere solucionarlo con el imperio del dinero y la fuerza, unido a un presidente de temperamento explosivo y voluntarioso. Lo malo es que gobierna un país que tanto tiene que ver con la paz mundial y la estabilidad de las naciones. Armado hasta los dientes busca a todo precio imponer su voluntad omnímoda que es al mismo tiempo la de los grandes magnates del dinero… poco amante del diálogo y la sana controversia, su ignorancia, su mentalidad estrecha y maniquea, no conoce otras ideas si no las suyas; por lo cual se convierte en una bomba de tiempo.
Mike Pompeo, secretario de estado de EEUU, hizo una declaración en rueda de prensa para establecer “la democracia en Venezuela”, y la llamó pomposamente “camino a la democracia” consiste fundamentalmente en que la actual asamblea (de mayoría opositora) nombre una comisión compuesta de integrantes del gobierno y la oposición. La oposición con sus mejores hombres y el gobierno con personas de segunda y tercera categoría, por un periodo no mayor de 8 meses, tiempo en el cual serán convocadas elecciones. Los integrantes de la asamblea no podrán ser candidatos, tampoco Juan Guaidó ni Maduro qué “nunca más podrán ocupar cargos públicos”. “Es el único camino que le queda a Venezuela para que se levanten las sanciones y otras que vienen en camino”.
Propuesta estúpida, miserable, provocadora, abiertamente ventajosa para la oposición, verdadera trampa para que la oposición incondicional amiga de EEUU se tome el poder; eche atrás las conquistas sociales, el país gobernado desde la embajada de EEUU, y las transnacionales repartiéndose sus riquezas como un botín en subasta; todo esto sin las menores esperanzas de revertir a corto plazo tamaño atraco.
EEUU tiene suficientes ciudadanos capaces de manejar mejor esa gran nación, anteponiendo el decoro, los valores, la ética, el diálogo por encima de la fuerza, el dinero, la imposición, el pensamiento único que permanentemente colocan al globo terráqueo al borde del abismo y su desaparición total por culpa de gobernantes intransigentes, hábidos de glorias terrenales, voluntariosos, maniqueos, mentalidades estrechas y poco familiarizadas con la academia y los valores.
Dante Alighieri dividió su infierno en 9 círculos: Puso en el séptimo a los criminales; en el octavo a los ladrones; en el noveno a los traidores; en el décimo a los indiferentes. Duro trabajo el que tendrán los demonios para buscarle un sitio justo al grupo que maneja a EEUU porque en ellos se resume lo más vil y miserable del ser humano, atavismos ancestrales revestidos de forma humana, monstruos alimentados por el hábito social.
NORBERTO BETANCOURT O.
