Convocar otro Plebiscito para la paz neoliberal y enemrmelada es otro disparate mayor del Jefe de la Casa de Nariño.
Fijo los derrotan de nuevo. El ex Presidente Uribe ya sabe como hacerlo (con mentiras y embustes) y con mucha eficacia.
Se van a gastar las platas de la absurda reforma tributaria que aprobaran a las carreras, en mas
propaganda contrapedagogica y en la compra venta de votos por parte de los gamonales santistas.
Otro Plebiscito es parte de la campaña presidencial de Santos, en la que ya tambien avanzan Uribe (y sus tres pollitos), Vargas Lleras y cierta Izquierda sistemica y pro santista que agoniza junto al regimen oligarquico.
La salida a la crisis esta en la Constiuyente soberana de la paz. Para el efecto es necesario convocar, en semanas, una pre Constituyente nacional en Bogota, previas Asambleas regionales.
Lo demas es puro fetichismo juridico liberal.
La pregunta que nos planteamos es la siguiente ¿es la convocatoria a otro plebiscito la salida a la crisis en que se encuentra el proceso de paz?
No lo veo tan claro. Me explico.
Después de la derrota de su invento plebiscitario del pasado 2 de octubre, Santos parce un zombi, un muerto resucitado que es esclavo de las demás agencias que gravitan en el campo político.
El Jefe de debate de ese experimento, el neoliberal y desvergonzado expresidente Cesar Gaviria, por lo menos tuvo la precaución de escabullirse y quién sabe en qué Catedral pereirana o gringa estará celebrando el acceso de F. Carrillo a la Procuraduría, con el apoyo cerrado de todo el Establishment, con más de 300 empresarios en la primera línea de la defensa de la propiedad privada y la explotación de los trabajadores.
Como la crisis del régimen es sistémica y nos movemos en el caos completo, sin reglas de juego, no podemos asumir así no más cualquier ocurrencia o disparate que se le ocurra al Jefe de la Casa de Nariño.
Como si no fuera suficiente con el dislate del primer domingo de octubre, en el que se sumaron todas las equivocaciones y omisiones, ahora se nos propone de nuevo un entuerto mayor: convocar un nuevo plebiscito para refrendar los nuevos Acuerdos que supuestamente se pactaran en la última semana de noviembre con la delegación de Londoño.
Muy seguramente el No repetirá la dosis conocida. El triunfo de los adversarios santistas será superior y, ahí sí, la debacle tendrá proporciones incalculables. De marca mayor.
Y hasta mejor porque la crisis del poder oligárquico se profundizara.
La euforia legalista del fetichismo liberal.
En medio de la euforia legalista y del fetichismo jurídico, los magos de la jurisprudencia constitucional liberal a la Montesquieu, han afinando la batería de sofismas para justificar semejante despropósito.
Un nuevo plebiscito es una afrenta a la sociedad y a las penurias que padecen millones de colombianos como consecuencia de la descomunal crisis económica y financiera que se quiere solventar con otro atraco tributario como el que ha puesto en curso el tándem Santos/Cárdenas en el aparato legislativo, que muy seguramente recibirá aprobación exprés por la aplanadora “enmermelada” de los caciques y gamonales de la coalición dominante. Los mismos que se robaron las regalías petroleras, las platas de la venta de Isagen y las inversiones de las 4G, asociados a Vargas Lleras.
Coger otro medio billón de pesos, originados en las cargas tributarias que se establecerán con IVA del 19% y un impuesto a los ingresos de 700 mil familias de la clase media, lo que facilitará es una derrota aplastante de los consensos de paz.
Las masas se levantaran indignadas contra el abuso santista y politiquero de utilizar los escasos dineros del presupuesto público en más propaganda estéril y en más mermelada para los gamonales y los “movimientos sociales” fletados desde la Casa de Nariño.
Vargas Lleras despego campaña por la Presidencia.
Es tan cierto lo anterior que ya el Vicepresidente Vargas Lleras empezó su campaña presidencial atacando, de manera oportunista, la reforma tributaria, mediante la convocatoria a la movilización de los beneficiarios de la vivienda de interés social/VIP y con el patrocinio de los constructores corruptos que han sido favorecidos con la contratación privilegiada desde el Ministerio de Vivienda.
Todo servido en bandeja de plata para el Ex Presidente Uribe Velez.
Para el Ex presidente Álvaro Uribe, esto es como pan servido. Con su gran capacidad de trabajo, de ir de pueblo en pueblo para hacer su torva pedagogía, y de manipulación torticera, la ocasión se la pintan calva para avanzar en los potenciales que ha mostrado para retornar, él mismo, a la Presidencia de la Republica en el 2018. Ese señor no se pone con pendejadas, ni derrocha el glamour encopetado de los integrantes del sanedrín santistas, en donde el oportunismo de la cooptación también aporta al desacierto.
La salida es la Constituyente de la paz.
Por enésima vez hay que decirlo, y con mucha entereza, la salida de la guerra y la construcción de la paz tienen un punto central de referencia. Es la convocatoria y reunión de una Constituyente soberana y popular.
Una Constituyente que debe organizarse, a partir de un pacto político, con un nuevo sistema electoral que permita la representación de las fuerzas sociales y populares desconocidas históricamente por el poder oligárquico que encarna el señor Santos y el ex presidente Uribe Vélez.
Acciones afirmativas específicas deben garantizar la representación justa y adecuada de los integrantes de las Farc, de los sectores agrarios, de los indígenas, de los afros, de las mujeres, de los Lgtbi, de los jóvenes, de los intelectuales, de las capas medias y de los trabajadores.
Reunir una Pre Constituyente en Bogota.
En ese sentido, la propuesta que formulamos es la siguiente:
Convocar de manera inmediata una Asamblea Pre constituyente en Bogotá, con la antesala de Pre constituyentes en las 8 principales regiones de Colombia.
La Pre constituyente debe estar integrada por representantes de las Farc y de los movimientos sociales y comunales. Allí no debe concurrir la clase politiquera santopastranouribista. Se trata de un evento soberano que dibuje y proyecte la Asamblea Constituyente de la paz. Esa debe ser su principal función.
Nota. Obama y la oligarquía bogotana siguen con sus planes para asaltar gigantesca renta petrolera de Venezuela, mediante la desestabilización política y el golpe de Estado contra las instituciones vigentes allí. Rechazamos la intriga imperialista y oligárquica. Se quieren robar completica la riqueza de los hidrocarburos de la patria de Bolívar.