Los colonizadores de EEUU salen de Europa huyendo del hambre, las guerras y el exceso de población. Llegan a un territorio grande que ellos lo ensanchan con su expansión sobre todo al sur y el occidente, más la compra que hacen a Francia y España y no pocos los incorporan por el poder militar. A esto se une sus riquezas en agricultura (un granero del mundo),
materias primas, clima igual al europeo, Raza blanca. Todo esto unido crea en sus dirigentes la idea no de la construcción de un gran país, si no de un gran imperio y a esto le dedican todos sus esfuerzos, como una verdadera cruzada. Todo lo anterior se reúne en la consigna: “el destino manifiesto”, el resto de América sufrirá los embates y zarpazos de su política expoliadora. Con sobrada razón un historiador afirmaba: “pobre de México tan lejos de Dios y tan cerca de EEUU”.
Por lo tanto causa asombro y perplejidad cuando sus dirigentes, de vez en cuando, afirman que lo más significativo e irrelevante de EEUU son la defensa de los valores. ¿valores?.
Es verdad que entre sus fundadores como George Washington, Abraham Lincoln y otros más, si había un concepto ético de la política, a tal punto que este último definió la democracia como : “el gobierno del pueblo, para el pueblo y por el pueblo”. Difícilmente se da una verdad tan densa, definida en cortas palabras.
¿Se da esto en EEUU?, mejor dicho: ¿sus dirigentes la aplican al gobernar?.
La realidad es que este país emprendió el camino de los imperios en política exterior de un pragmatismo feroz y ventajoso – “EEUU no tiene amigos ni enemigos, tiene intereses” (Woodrow Wilson) -, en lo interior el predominio del dinero sobre todas las cosas, a tal punto que es el centro del consumismo por excelencia, y el dólar la carta de presentación de cualquier persona, midiendo todo en función del mismo.
¿son estos valores? ¿o el materialismo más rampante?.
Este estilo de vida de derroche y despilfarro sin ningún miramiento, que EEUU exporta como el modelo de vida para el resto del mundo, está poniendo en peligro la misma subsistencia del planeta y lo que en ella se contiene: la contaminación ambiental, el derroche de las materias primas aún de aquellas de corta duración, el acabar con los pulmones del mundo como el caso del Amazonas, el agua, el consumismo exacerbado en unas pocas personas mientras las inmensas mayorías padecen de escases o definitivamente no tienen para suplir las necesidades básicas. El ser humano es socializado en el egoísmo, la ambición, la mezquindad, la cicatería, la codicia…en estas condiciones el otro se nos presenta como un enemigo potencial.
Pero lo que más deja perplejo y sin palabras es su doble moral, su doble rasero: lo que para ellos es bueno y correcto de acuerdo a sus intereses para los demás es malo. Con cara gano yo con sello pierde usted. Así por ejemplo en EEUU todo el que quiera produce y consume droga, pero no lo permite para el resto del mundo. Vive pendiente de cualquier gobierno no adicto a sus intereses para desestabilizarlo o intervenirlo militarmente y colocar otro manipulable a sus fines.
¿Existe democracia en EEUU deacuerdo con la definición de Lincoln?. Definitivamente no.
Veamos: los dos partidos tradicionales que han manejado al país desde su fundación, son en esencia la misma cosa, sus diferencias son temperamentales, matices de la misma ideología.
Detrás de cada presidente electo – es de anotar que allí se da el mayor numero de abstencionismo en el mundo ya que cualquier ciudadano sabe de antemano que los dos partidos son ramas del mismo árbol- están los grandes monopolios económicos: el complejo militar, el complejo industrial, el complejo comercial, el complejo judío, las grandes transnacionales de las comunicaciones habladas y escritas, la televisión. son los verdaderos factores de poder, el poder detrás el trono que pueden inclinar la balanza del estado en cualquier momento de acuerdo a sus intereses. Allí las grandes mayorías no cuentan, permanecen invisibilizadas, el pobre no existe. Todos juntos escasamente llegan al 1%, pero tienen el capital, por lo tanto el poder. ¿Es esto democracia?.
Los países que estrechan relaciones con este imperio, sobre todo los subdesarrollados de instituciones frágiles y débiles y unen su destino a este país, es como colocar la cabeza en la boca del lobo, ir en caída libre, vender el alma al diablo, es un suicidio en primavera, aunque para su clase dirigente, vendida y entregada a las transnacionales esto poco importa, con tal que sus bolsillos estén repletos de dinero y su medio ambiente lleno de comodidades.
El día que las relaciones entre las personas sean de ética y valores, la humanidad habrá dado un paso cualitativo en su evolución. Si son de mercancías, no nos extrañemos que veamos unas relaciones preñadas de muerte, sangre, sudor y lágrimas.
NORBERTO BETANCOURT OSORIO.