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Rectoria

No obstante que según la Constitución política colombiana (ley de leyes) el Estado y su gobierno están organizados como una democracia participativa y pluralista, en la Universidad del Quindío, estatal por cierto, se desconocen, por las actuales directivas, los más elementales principios de la participación y las leyes que regulan los mecanismo  e instituciones de participación ciudadana. Allí lo que se dan son escenarios de simulacro, como la reciente

Rendición de cuentas, llena de mentiras y falsos datos para engañar a la sociedad; y espacios controlados, llenos de miedo e intimidación, para hacer creer que la democracia tiene vigencia.

 

La Asociación de Profesores de dicha Universidad/ASPU, en reciente declaración, denuncia que en tal Universidad se vienen dando cambios y transformaciones introducidas desde la Rectoría de Echeverry Murillo y Polania Obando en un tiempo exprés, sin mayor debate y participación de parte de la comunidad universitaria, con el argumento de unos compromisos de la Rectoría con el Ministerio de Educación que al día de hoy se desconocen.

 

Esas actividades son:

 

La modificación de Acuerdos que reglamentan la labor académica profesoral.

 

Se propone desde la Vicerrectoría Académica la modificación de los acuerdos que reglamentan la labor académica de los profesores bajo el único argumento de la estabilidad financiera y la defensa se focaliza en:

 

a) Que la docencia directa bordea mínimo las 16 horas en casi todas las universidades;

b) La preparación de clases no es necesaria, hágame el favor!, para desarrollar las distintas actividades académicas, y

c) El “incumplimiento” de los docentes en las horas de docencia directa registrada en las agendas académicas.

Este discurso no considera que la propuesta lesiona los tiempos para la investigación, eje misional de la Universidad e indicador preponderante en los procesos de acreditación institucional, y la afectación negativa en términos de calidad en el desarrollo de los diversos procesos educativos. Lo que sumado a los costos de las nóminas de los administrativos provisionales/prejubilados/clientelas de la ex gobernadora Sandra Pola, pueden llegar a triplicar en horas lo reportado en el estudio de la Oficina de Planeación y Desarrollo: Análisis Agenda Académica 2015-2 en relación con los profesores de planta, ocasionales y catedráticos.

 

De otro lado, se pretende consolidar el peor de los enclaves del clientelismo corruptor regional en la Universidad mediante la creación de una nueva Vicerrectoría en cabeza de un veterano y consumado exponente de las maquinarias electoreras cafeteras.

 

En efecto, en el mes de junio del año pasado se presentó al Consejo Superior de la Universidad la propuesta para la creación de la Vicerrectoría de Extensión y Desarrollo Social para la aprobación, la misma se presenta con nombre propio: Luis Fernando Polania Obando, convertido hoy en el nominador e invitado permanente por el Consejo Superior, iniciativa que fue rechazada aparentemente por el Consejo Superior. Sin embargo, el día 30 de diciembre cuando toda la comunidad académica se encontraba en el periodo de vacaciones colectivas, se expide la resolución por medio de la cual se crea dicha vice rectoría académica. Conviene recordar que la extensión y la proyección social desde la ley 30 de 1992, son un asunto transversal en la dinámica y procesos académicos que no requieren burocracia, dado que es con cada nicho académico –facultades y programas- que se dinamizan dichos procesos para que ganen los estudiantes y la institución. Por ello la comunidad académica en un ejercicio pleno amplio, pluralista, democrática e incluyente en una comisión conformada por Aspu, Sintraunicol, Aceu, Feu, Replicas, entre otras organizaciones y la administración Parra Cardona decidieron en el año 2004 que tal dependencia no se crearía, no solo por los costos en la burocracia, sino por las responsabilidades, dinámicas y tareas que exige la extensión y la proyección social desde las facultades y los programas, lo que quedo consignado en el Estatuto General de la U. del Quindío, según el Acuerdo 005 del 28 de febrero del 2005.

 

En tal sentido, Aspu, señala que está completamente convencida de que no existen aún las condiciones institucionales para la creación de esta nueva instancia burocrática, pues como deja ver el antecedente para su constitución, dicha Vicerrectoría se convierte en el “pago” al señor Polania Obando por adelantar las gestiones pertinentes en las relaciones que se obligan para el nombramiento de Rector, lo que ha sido evidente en los tres últimos periodos y sobre lo cual se ha hecho la denuncia en repetidas ocasiones. A lo anterior se agrega que la estructuración de dicha dependencia corresponde al modelo neoliberal de mercantilizar cada vez más las Universidades públicas, bajo la figura de la venta de servicios, es decir, se desdibuja la naturaleza académica y por tanto misional del Alma Mater.

 

Otro aspecto que es importante resaltar se orienta a conocer la naturaleza del convenio adelantado a través del modelo de proyección social de la Facultad de Ingeniería cuyo fuerte es la interventoría o la consultoría es este caso con las obras que INVIAS viene adelantando en el país.

 

Hoy se necesita que se haga público a cuánto ascienden los recursos por este convenio en particular Invias-Universidad del Quindío, quienes han sido los beneficiados con dicho convenio, como se han retroalimentado las diversas actividades académicas en los programas de la Facultad de Ingeniería  y a cuánto asciende lo que el convenio le deja en utilidades económicas a la Universidad. Lo anterior por cuanto es fundamental reconocer las lógicas que vienen desarrollando las distintas unidades académicas administrativas en torno a la cacareada Proyección Social de la Universidad.

 

Nota. Un verdadero simulacro fue la Rendición de cuentas presentada el día 28 de abril por el Rector Echeverry Marilo (http://bit.ly/1NGkklS), sobre el funcionamiento de la U. Q en el año 2015. Es mentira que la Universidad este sana administrativamente cuando se han contratado casi 270 nuevos funcionarios a dedo y recomendados por la ex gobernadora Hurtado y su delincuencial conyugue, como un pago de favores politiqueros. No hay transparencia en diversos contratos y actividades que adelanta la actual Rectoría.

 

Con varias organizaciones adelantaremos en los próximos días una Audiencia publica para examinar esta mediocre rendición de cuentas que desconoció las recomendaciones y orientaciones científicas del Manual de Rendición de Cuentas del Departamento Administrativo para La Función Publica (http://bit.ly/1SYqHk1) y del Conpes 3654 del 2010 (http://bit.ly/1LSxGei) con la política pública correspondiente que olímpicamente ignoraron estos agentes clientelares de nuevo cuño en el mundo universitario regional.